
Los juguetes, artículos navideños, ropa y alimentos son lo que compra el público según hemos visto hoy.
Chicha, sol y buena comida


"Libros" a diez soles, Paulo Coelho, Jaime Bayli (..)" Continúa gritando una vendedora. "Vestidos para muñecas", "siu mai calientitos", ¿Buscas librería?, gritan otras. Estamos en la puerta de Capón, el barrio chino del Perú, uno de los más antiguos de Lima, el mismo que en el siglo XIX llegaron los hijos de oriente, descendientes de los trabajadores coolies para quedarse.
atención. Inaugurada en 1971, donada por el Gobierno de Taiwan, es el ingreso a ese pequeño mundo de inciensos, siu mai, patos, tofu, dragones, librerías, chifas, caminantes apurados, vedendores.
A paso lento vemos en distintas vitrinas de los chifas* y bodegas pollos asados, patos, salchichas chinas, bocaditos chinos, dulces y salados. Todo nos jala la vista. Hay numerosas bodegas, incluso hay dos supermarket (en la calle Paruro) llenos de productos llegados de oriente, encontramos espadas y esculturas imponentes. Hay de todo, desde platos, palitos chinos, accesorios para chifas, lámparas, sandalias, vestidos, periódicos, revistas, hasta sopas instantáneas, fideos , salsas, huevos de mil años, etc.
También están los chifas famosos, con precios más altos, como el wa lok, el Salón Capón, San Joy Lao -uno de los chifas más antiguos-, entre otros. Ofrecen platos a la carta, comida especial cantonesa; como también banquetes. Es muy usual que te canten feliz cumpleaños en chino, en caso de almorzar ahí con tu familia y/o amistades.
Pero hay más. Están las tartaletas de leche asada, empenaditas picantes, las criollas alitas y piernitas de pollo crocante, min pau, etc.
Seguía mirando el mar y ahora le tocó el turno a un vendedor de pan. Al menos eso entendí cuando lo ví acercarse con una canasta. Pero pronto comprendí que no vendía ni pan, ni galletas. "Amiga, ¿quieres cookies"?, preguntó muy sonriente. ¿A qué le llamas cookies?, respondí. "¡Tengo de la buena!", aclaró. ¿Te animas?". Me reí. No lo podía creer, que me ofreciera cookies y de la buena un señor disfrazado de panadero, en plena playa en horas de la tarde.
Visitar a mis tías abuelas era toda una aventura. Su casa estaba llena de fotografías antiguas de nuestros descendientes, todos chinos. Con sus manos preparaba deliciosos platos, sobre todo está en mi memoria aún ese pollo crocante preparado con canela china que le daba un sabor muy suyo. He comido tanto arroz chaufa en mi vida que aprendí a cocinarlo con facilidad de sólo verla cocinar. He ido a asociaciones chinas, ví a niños jugando y riendo.
La Chunga, obra del escritor peruano Mario Vargas LLosa, es una comedia que se desarrolla en un bar piurano; se estrenó el 7 de noviembre en el Théâtre 13 de Paris con platea llena.
La obra, que fue escrita en 1986 por Vargas LLosa y hoy vista en Paris en el Teatro 13, trata sobre un encuentro en un bar piurano llamado "la chunga". Todo se inicia cuando la actriz Claire Mirande -que caracteriza a la propietaria del bar- presta dinero a un cliente habitual, Josefino (Serge Dupuy), de la banda de Los Indomables, para que se lo juegue a las cartas.
Catalogada como una versión "rica en matices" y "profunda en resonancias", 'La chunga', sumerge al espectador en el sórdido entorno de la acción, el humo de los cigarrillos, la bruma del alcohol, el lenguaje barriobajero, peleas y amenazas que reviven los Indomables. Ellos cada día tratan de aclarar el misterio de lo qué pasó verdaderamente esa noche cuando una joven desapareció en ese bar.
En palabras del autor, "los temas que la obra desarrolla o roza no deberían prestarse a confusión: el amor, el deseo, los tabúes, la relación entre un hombre y una mujer, los usos y costumbres de cierto medio, la condición femenina en una sociedad primitiva y machista y la manera como estos factores objetivos se reflejan en el ámbito de la fantasía".
Piura es maravillosa. De sus atractivos, la gastronomía es la que más apasiona. Y justamente hoy encontré a muchos apasionados. Se trata de jóvenes estudiantes de Hotelería y Turismo de la Universidad César Vallejo de Piura que sin dudar viajaron a pueblos piuranos para rescatar lo nuestro.
"En Piura existe mucho potencial. Y con esta pequeña feria tratamos de demostrar eso", nos dice sonriente Elva Calderón una joven estudiante.
Nada más cierto. En cada stand resaltaba los platos típicos de cada provincia piurana. Los chicos se esmeraron, eso sí. No hay duda. Inclusive se vistieron con trajes típicos de los lugares que visitaron. Además estuvieron presentes los campeones de tondero, los hermanos Arévalo, un ceramista chulucanense haciendo una demostración en vivo de cómo se hace la cerámica y el artista escultor Oscar Aquino.
Sin duda la feria de hoy es una muestra de la gran pasión que tenemos los piuranos por lo nuestro, por nuestros atractivos turísticos, por nuestra gastronomía, por nuestras tradiciones.
Ocar Aquino es un artista, escultor - tallador, hijo de Catacaos, Piura, agradecido de haber nacido en esta tierra cálida. A sus 46 años, con numerosas exposiciones en el Perú y en el extranjero*, habla orgulloso de sus hermanos, también artistas y de su hijo José Arnulfo quien sigue sus pasos.
¿Usted ama a Piura?



En Piura en el día de todos los santos (1º de nov.) de años anteriores se solía regalar los angelitos o dulces típicos. Usualmente lo hacía una madre que había perdido a su pequeño hijo, dándo dulces a niños que se asemejaban a su 'finadito' o pariente fallecido.
Los angelitos son variados dulces preparados que se colocan en bolsitas transparentes. Hay desde merengues, alfajores, camotillos, suspiros, rosquitas.
Hoy esta costumbre se está perdiendo; no obstante los angelitos ya no se suelen regalar como antaño sino más bien se venden, a precios módicos (una bolsa pequeña de estos dulces está un sol). Por ello se continúa la tradición de consumir estos dulces en estas fechas.
Igualmente se suele comer la rosca de muerto, que es un tipo de pan muy suave de yema de huevo, salada que lleva una cruz en el medio. Y se encuentra de todos los tamaños.

Me he quedado asombrada de la cantidad de flores que se está vendiendo hoy, en el día de los difuntos en Piura. Las que más salen son los claveles y rosas.
Aquí una imagen que capturé de una vendedora de flores en Piura.


sus "finaditos" para rezarle, conversar. Algunos incluso comen y beben en torno a su tumba. Llevan comida y bebida (chicha de jora) . Contratan cantantes con guitarras.



Hoy se celebra el Día Internacional del Chef. Por ello felicitamos a todos los Chefs peruanos e internacionales por su arduo trabajo, desempeño, vitalidad, creatividad en este su día de reconocimiento internacional.
Como sabemos ser un chef en nuestro país es un oficio que está adquiriendo muchísima relevancia ya que gracias a su trabajo la cocina peruana es conocida a nivel mundial, por eso hoy reconocemos su excelente trabajo y su gran pasión por el arte culinario del Perú.
A continuación un extracto de una entrevista que hice a la Chef Claudia Miranda, certificada por la WACS, quien da unos consejitos a los estudiantes de cocina:
Cómo ve a los actuales alumnos de Gastronomía? Cuál es su perfil? Cómo pueden mejorar?
Chef Claudia: Definitivamente cada vez hay mayor interés en los jóvenes por seguir esta apasionante carrera; pero un buen grupo cursa esta carrera con miras a emigrar. Por una parte es bueno, por que cada vez se lleva la sazón peruana al mundo.En el perfil, deben ser personas muy disciplinadas, ordenadas con muy buen sentido del humor, y muy creativos.Uno debe acostumbrarse de a pocos a llevar la rutina del orden y también pueden mejorar como profesionales no solamente siendo hombres de práctica sino de teoría.

Además es bueno visitar este pueblo de artesanos para ver sus obras, desde joyas, las dormilonas, sortijas, collares, finos trabajos de filigrana, esculturas de madera, adornos de madera de zapote, además de la cerámica de chulucanas.
Entre los adornos de zapote torneado para uso doméstico encontramos jarrones, vasos, cuadros, morteros, que se encuentran en la calle Comercio de esta ciudad típica piurana.
También están los típicos sombreros de paja y toquilla, bolsas, entre otros artículos geniales que se pueden adquirir en esta calle del distrito conocida antiguamente por haber recibidos miles de mercaderes que han comercializado productos de paja y toquilla y junco.








No voy a mentir me emocionó que entre sus combos llamados "tejas" estén platos típicos, como es el caso de "tejas 1" que viene tamalitos verdes y arroz con cabrito.
Pero como seguía deseando un ceviche; pedimos el "Ceviche las tejas" que nos pareció muy agradable por su picante sabor y sus pescados y mariscos frescos.