A esa madre que está en la costa, en la sierra y en la selva. Aquella que con mucha fuerza saca adelante a su familia, la que es un ángel, la que aguanta todo. La que trabaja a diario, la que cocina en Piura y me deja con la boca abierta queriendo más, la que está en el gimasio en Lima y gusta estar en forma, la que está tejiendo en Cusco y me regaló una sonrisa, la que le gusta el helado en Puno y me tiró una piedra por tomarle fotos, la que ama en todos lados, a ti, feliz día.
*Las fotos las tomé en el mercado de Cusco; Celendín - Cajamarca; Cusco; Chulucanas - Piura; Puno; Chanchamayo - Huánuco; Lima.
11 may. 2007
10 may. 2007
Café con un toque de arte
¿Es posible hacer una obra de arte con el café que preparamos en la mañana? Al parecer todo es posible en esta vida. Y más aún teniendo como herramientas una cuchara y un poquito de creatividad.

Las imágenes me las enviaron por email y corresponden a roytawan.com, unos verdaderos artistas del café. En verdad quedé impresionada al observar cómo de la nada se crean forman vistosas y bellas. Increíble; pero cierto.


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artistas del cafe roytawan
7 may. 2007
Los carapachos del Malibú sullanero
Ya era la 1 de la tarde y en mi casa habían preparado olluquito del cuál no soy muy adepto. No es que no me guste ese plato, sino que era sábado y tenía ganas de comer mariscos, pescados; sobre todo un cevichito de conchas negras que cualquier cocinera piurana sabe preparar muy bien.
En casa me comentaron que mis padres viajarían a Sullana -ciudad ubicada a media hora de Piura- por cuestiones de negocios. Decidí acompañarlos con la intención de almorzar con ellos lo que tanto deseaba.
Cuando subí al carro, mis padres me contaron lo que harían y el tiempo que demorarían en la ciudad de la Perla del Chira. Ellos me preguntaron si ya había almorzado, les dije que no. No obstante, ya me imaginaba que algo bueno me invitarían.
Por la ventana del auto veía a gente deleitarse, ellos sostenían en sus manos cañitas y tomaban cocos helados. Ya habíamos llegado a Sullana; y pronto mis padres cerraron negocio, estaban sonrientes, por lo cual asumí que les fue bien. Era hora de comer. Mi papá arrancó el auto y se dirigió a uno de los restaurantes famosos de la ciudad: Malibú.
El lugar era acogedor, con pinturas de los principales atractivos turísticos de Sullana. Pregunté cuál era el plato principal, los carapachos de mariscos, me respondieron. Lo pedimos. Y definitivamente, estaban maravillosos. Era una mixtura de mariscos: pulpo, calamar, pulpa de cangrejo y caracol revueltos con una salsa deliciosa rojiza. En diez minutos el plato desapareció.

Enseguida pedimos un ceviche mixto de langostinos, pescado, conchas negras y zarandajas de sabor típico norteño y con un toque de picante inigualable. Estaba en mi gloria, finalmente mis deseos se cumplieron.

Para concluir el almuerzo vinieron las albóndigas de pulpa de cangrejo acompañadas de hojuelas de papas fritas, crocantes, calientes, deliciosas.

La tarde fue muy fructífera para mi estómago que salió satisfecho de este viaje a Sullana.
Textos y fotos: Alberto Montero Wong, estudiante de Comunicaciones de la Universidad de Piura (mi primo hermano)
En casa me comentaron que mis padres viajarían a Sullana -ciudad ubicada a media hora de Piura- por cuestiones de negocios. Decidí acompañarlos con la intención de almorzar con ellos lo que tanto deseaba.
Cuando subí al carro, mis padres me contaron lo que harían y el tiempo que demorarían en la ciudad de la Perla del Chira. Ellos me preguntaron si ya había almorzado, les dije que no. No obstante, ya me imaginaba que algo bueno me invitarían.
Por la ventana del auto veía a gente deleitarse, ellos sostenían en sus manos cañitas y tomaban cocos helados. Ya habíamos llegado a Sullana; y pronto mis padres cerraron negocio, estaban sonrientes, por lo cual asumí que les fue bien. Era hora de comer. Mi papá arrancó el auto y se dirigió a uno de los restaurantes famosos de la ciudad: Malibú.
El lugar era acogedor, con pinturas de los principales atractivos turísticos de Sullana. Pregunté cuál era el plato principal, los carapachos de mariscos, me respondieron. Lo pedimos. Y definitivamente, estaban maravillosos. Era una mixtura de mariscos: pulpo, calamar, pulpa de cangrejo y caracol revueltos con una salsa deliciosa rojiza. En diez minutos el plato desapareció.

Enseguida pedimos un ceviche mixto de langostinos, pescado, conchas negras y zarandajas de sabor típico norteño y con un toque de picante inigualable. Estaba en mi gloria, finalmente mis deseos se cumplieron.

Para concluir el almuerzo vinieron las albóndigas de pulpa de cangrejo acompañadas de hojuelas de papas fritas, crocantes, calientes, deliciosas.

La tarde fue muy fructífera para mi estómago que salió satisfecho de este viaje a Sullana.
Textos y fotos: Alberto Montero Wong, estudiante de Comunicaciones de la Universidad de Piura (mi primo hermano)
4 may. 2007
Como en Cantón
En Piura se come bien, de eso no hay duda. Otra de las ofertas culinarias, aparte de ceviches, sudados, secos y demás, son los chifas. Y el más popular de la ciudad es Cantón.
Ubicado cerca de la Plazuela Merino, de este chifa nos gusta el sabor a kión en sus arroces, saltados, sopas humeantes, todos combinados con el sabor de la bebida nacional (inka kola). Aunque, no voy a negar, hay quienes son infieles y prefieren la chicha morada.
Y al parecer no sólo me gusta a mí el kión de sus comidas. De hecho en este chifa por las noches no cabe ni un alfiler más. Poco a poquito la gente va llenando los asientos vacíos. Es uno de los más concurridos. Buena comida. Por tanto, es muy recomendable.

Ubicado cerca de la Plazuela Merino, de este chifa nos gusta el sabor a kión en sus arroces, saltados, sopas humeantes, todos combinados con el sabor de la bebida nacional (inka kola). Aunque, no voy a negar, hay quienes son infieles y prefieren la chicha morada.
Y al parecer no sólo me gusta a mí el kión de sus comidas. De hecho en este chifa por las noches no cabe ni un alfiler más. Poco a poquito la gente va llenando los asientos vacíos. Es uno de los más concurridos. Buena comida. Por tanto, es muy recomendable.


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chifa piura canton
1 may. 2007
Comida piurana: para chuparse los dedos
Lo primero que hago al llegar a Piura es comer, indudablemente. Existen numerosas picanterías y restaurantes que ofrecen variedad de platos. Pero existe uno solo donde siempre caigo, por la buena ubicación, púes está cerca a la Plaza de Armas de la ciudad.
Pero además, y lo más importante es que en este restaurante, puedo comer con mi mate y mi cuchara de palo, como si estuviera en el campo, frente a mis algarrobos. Es ahí donde puedo degustar platos típicos de la zona que sólo se comen en festividades como es el caso de "la malarrabia" (se degusta en semana santa) y otros como seco de cabrito, de olorcito a leña, maravilloso, con mi tamal verde; además de mi adorado ceviche mixto, picante, con conchas negras recién salidas del mar. Riquísimo.
Para quienes no conocen nada de estos platos, pasare a dar una breve explicación de ellos.
El primero: ceviche. Es una mezcla sabrosa de pescados, mariscos, limón, ají, sal y culantro molido. En Piura se acostumbra acompañarlo con zarandaja, yucas cocidas, adornado de una raja de tomate. El segundo: Seco de chabelo. Combinación deliciosa de plátanos asados al carbón con cecina piurana o carne secada al sol por varios días.

El siguiente es el seco de cabrito piurano. Viene arroz, cabrito sudado a la olla, tamal verde y menestra.

La malarrabia es un plato exclusivo para Semana Santa, se come en todo el norte y viene pescado, arroz, menestra y una combinación deliciosa de plátano maduro con queso fresco de la zona.

El nombre del restaurante piurano se llama Los cántaros.Todos conocen como llegar. Y si va, realmente me lo agradecerá.
Pero además, y lo más importante es que en este restaurante, puedo comer con mi mate y mi cuchara de palo, como si estuviera en el campo, frente a mis algarrobos. Es ahí donde puedo degustar platos típicos de la zona que sólo se comen en festividades como es el caso de "la malarrabia" (se degusta en semana santa) y otros como seco de cabrito, de olorcito a leña, maravilloso, con mi tamal verde; además de mi adorado ceviche mixto, picante, con conchas negras recién salidas del mar. Riquísimo.
Para quienes no conocen nada de estos platos, pasare a dar una breve explicación de ellos.
El primero: ceviche. Es una mezcla sabrosa de pescados, mariscos, limón, ají, sal y culantro molido. En Piura se acostumbra acompañarlo con zarandaja, yucas cocidas, adornado de una raja de tomate. El segundo: Seco de chabelo. Combinación deliciosa de plátanos asados al carbón con cecina piurana o carne secada al sol por varios días.

El siguiente es el seco de cabrito piurano. Viene arroz, cabrito sudado a la olla, tamal verde y menestra.

La malarrabia es un plato exclusivo para Semana Santa, se come en todo el norte y viene pescado, arroz, menestra y una combinación deliciosa de plátano maduro con queso fresco de la zona.

El nombre del restaurante piurano se llama Los cántaros.Todos conocen como llegar. Y si va, realmente me lo agradecerá.
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comida piurana cocina peruana
18 abr. 2007
Mordiendo la taza de café

Más cafeína antes de cruzar. No estoy preparada aún. No para enfrentar lo que hay dentro. Más café. Mi estómago está ácido. Miro alrededor. Más personas. Un ciento de ellos guardan turno de ingreso, sentados en sillas blancas. Algunos se acercan despacio hacia el vigilante. Ruegan. Quieren entrar.
Tomo un sorbo. El sabor sigue amargo. Tan amargo como cuando recibí la noticia. Esa abuelita de mi mejor amiga, la mujer sonriente que ví el 31 de diciembre, la que tenía en su cuello cintas amarillas, la que le regaló una bicicleta a su nieta, la que abracé cuando el reloj apuntó la media noche, ahora está detrás de esa puerta.
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relato cafe hospital
13 abr. 2007
Machupichu al ketchup

Ya que nuestro gran Machupichu fué, está y estrará de moda, nos atrevimos a dibujarlo pero con cuchillo y ketchup.
Una de las páginas que llamó mi atención cuando visité el Blog de Garbancita es ketchupart. Aquí los artistas y aficionados se insipiran utilizando elementos nada fáciles de manejar para hacer sus obras de arte.

Usted podrá encontrar dibujos graciosos desde un payaso hasta un cuatro ojos sacándole la lengua. Inclusive Mao Tse está en Ketchupart. Para ver dibujos vaya aquí.
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machupichu ketchupart
12 abr. 2007
Mis costillas y yo
El camino de la Joyería de mis tíos a casa me lo sé de memoria. Tanto tiempo que viví en Piura. Pero en el cambio de semáforo, Pepino, como le decimos de cariño a mi tío, giró su auto a la derecha. Era casi las dos de la tarde y en casa nos esperaba la comida lista. ¿Dónde vamos? Tú síguenos nomás, me callaron.
Después de 4 minutos (la ciudad es chiquita) caímos en un bar-restaurante. Pero no era un bar cualquiera. Era el bar, con tradición y todo, uno de los más antiguos de Piura.
Pronto llegaron esas costillas de cerdo con 'majado de yuca' súper humeantes, calientes y de sabor indescifrable, sazonadas con un no lo sé, que me hicieron olvidar que el local estaba oscuro, que había bulla por todos lados, que jamás había escuchado el nombre de ese restaurante. Me olvidé de todo. Sólo eran las costillas y yo. No le hice caso ni al ceviche ni a los demás platos de la mesa. No existía nada más.
Mis tíos hablaban sobre las comidas típicas antiguas de Piura; pero yo no oía. Estaba sorda y muda. Lo único que recuerdo es que el bar se llama Teresa, que todos conocen cómo llegar, menos yo. Pero lo que sí sé es que salí con la barriga llena y el corazón muy contento.
Después de 4 minutos (la ciudad es chiquita) caímos en un bar-restaurante. Pero no era un bar cualquiera. Era el bar, con tradición y todo, uno de los más antiguos de Piura.

Mis tíos hablaban sobre las comidas típicas antiguas de Piura; pero yo no oía. Estaba sorda y muda. Lo único que recuerdo es que el bar se llama Teresa, que todos conocen cómo llegar, menos yo. Pero lo que sí sé es que salí con la barriga llena y el corazón muy contento.
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bar teresa comida piura costillas de cerdo